Current status: it’s complicated …
Para ser honesta mi relación con el fleco ha sido complicada: unos días puro amor y otros días cero comprensión y mucha rebeldía ¡Ha sido toda una ruleta de emociones! (If you know what I mean).
Mi cabello pedía a gritos un cambio, el más mínimo que fuera, porque el mismo corte y el mismo peinado todos los días … incluso hasta el espejo se aburría (jaja). Muy en el interior había una vocecita que me decía ‘hazte un fleco, hazte un fleco …’, pero espera, ¿pasar por el fleco otra vez? Recuerdo que toda la infancia lo usé, típico que sales en la foto con tu fleco todo esponjado y super cortito -porque en ese entonces no había plancha alaciadora- incluso mi mamá me ponía de esos tubos, para que tuviera la forma ideal de fleco de los 80’s (que tiempos), así que por obvias razones me dije a mi misma que HELL NO!
Poco a poco la vocecita se hacía más fuerte cada vez que visitaba Pinterest, la página principal se llenaba de imágenes de chicas con aire setentero, ondas naturales en el pelo y un fleco muy desenfadado, ‘tipo no me arreglo, pero me puse varios productos para que así luciera mi cabello’. Y poco a poco me fui convenciendo de que no todos los flecos lucen como de niña de 10 años y luego, cuando menos lo esperé … ya estaba en la silla de la estilista diciendo cómo lo quería.
Como te decía, ha sido un amor-odio, no me quejo, creo que le da un aire distinto a mi persona y para ser sincera luce muy bien con una simple cola de caballo. Así que te dejo con algunas de las imágenes que me inspiraron, para que en caso de que te animes sea más fácil decirle a tu estilista *o darle instrucciones, cof, cof*. de cómo lo quieres.
Pictures via Pinterest